Este blog es una pequeña ventana a paisajes, tal vez soñados, que nos invitan a iniciar o reemprender de nuevo un viaje a la naturaleza primigenia.

"Hombre lento"

Ejercitar la abstracción, además de atención y concentración, requiere paciencia, perseverancia y tiempo. La fotografía pausada, lenta, reflexiva, necesita masticar el paisaje para desgajarlo en porciones minúsculas y sólo entonces descubrir en la inmensidad del espacio algún tesoro oculto que podamos llevarnos en el zurrón. Por ello es necesario viajar despacio, caminar pausadamente, paladear con devoción cada instante y en un ejercicio supremo de autocontrol, renunciar a nuevos paisajes que recorridos a vuela pluma no nos permitirán captar su verdadera esencia, la que contempla un hombre lento.