Este blog es una pequeña ventana a paisajes, tal vez soñados, que nos invitan a iniciar o reemprender de nuevo un viaje a la naturaleza primigenia.

"Reciclaje fotográfico"


Una de las decisiones que debemos tomar respecto a nuestro archivo digital es la eliminación de las imágenes que no alcanzan un mínimo nivel de calidad. Por una parte debemos ser exigentes para no acumular ingentes cantidades de fotografías insulsas, pero también tenemos que asegurarnos de que agotamos todas las posibilidades de aprovecharlas, incluyendo por supuesto el monocromo. En esta ocasión una toma en color muy normalita de las Tres Sorores, en el Valle de Ordesa, se convierte gracias a la edición digital, en una fotografía monocromo en la que he oscurecido el cielo para resaltar el "algodón" de las nubes. El re-encuadre al formato cuadrado elimina una de las cumbres pero dinamiza la toma al lanzar desde la cumbre de la izquierda las tres nubes hacia la esquina superior derecha, mientras el pico más alto "sostiene" el peso del punctum (Roland Barthes) y equilibra la composición.

"El paisaje romántico"


Las formas de las ramas y la presencia de la niebla me inspiraron para revelar esta imagen al estilo de la pintura romántica. Color vívido en la pestaña de calibración de cámara en Photoshop y algo de claridad negativa para el desenfoque, me permiten acercarme a la pintura y disfrutar de este paisaje de Artiga de Lin (Viella). Me acerqué a esta zona en busca de fotos de otoño y en una tarde con el cielo cubierto de repente la niebla se nos echó encima, momento que aproveché para disparar la cámara a diestro y siniestro. Una hora más tarde ésta había desaparecido de forma mágica y el paisaje volvía a ser el de antes.

"El solitario III"

Esta es la imagen completa de la fotografía "El solitario" que nos permite reflexionar sobre las diferentes interpretaciones  que podemos hacer de un mismo negativo digital.  La soledad del sujeto, en este caso un árbol, se hace más evidente al incluir en el encuadre un paisaje de mayor amplitud que incrementa la sensación de abandono y soledad, aunque realmente los árboles nunca están solos...

"El circulo mágico"

Podría ser un reflejo en el agua al dejar caer una piedra en la superficie, pero en realidad es una haya bailando, girando sobre sí misma y trazando con sus hojas un circulo mágico que puede verse en contadas ocasiones en la falda del Moncayo, cuando el cierzo sopla desbocado y permaneces tumbado y en silencio. La multiexposición en un mismo raw me ha permitido inventar esta imagen, más cerca del cuento y la leyenda que de la realidad, pero que sigue estando muy cerca de la naturaleza.

"Hayas de la mano"

Pocas veces hacen justicia nuestras fotografías al paisaje real y sobre todo a lo que sentimos cuando lo contemplamos. Debemos ser conscientes de la limitación del medio fotográfico buscando "in situ" y a pie de obra la mejor imagen posible. También es necesario arriesgarse y buscar el contraluz que nos permita asombrarnos ante la contraposición de las sombras frente a la luz, en este caso amarilla, de dos hayas que van de la mano. 

"El solitario II"

La primera elección al contemplar el paisaje fue pensar en la imagen en blanco y negro, aunque funciona perfectamente en color. Y a continuación estudié la composición, que me permitía más de una interpretación. En ocasiones me gusta centrar el sujeto principal, me da la sensación de que la escena rota sobre él y enfatiza su importancia. El peso visual de la ladera a su derecha se ve compensado por las nubes del lado contrario... y por la tenue sombra del solitario. Una vez más pocos elementos me permiten encontrar una situación sugerente. En el terreno no podía apartar la mirada del árbol, y existe otra fotografía sin ladera, sólo nubes, nieve y madera. Bueno, y una tenue sombra a su vera.

"Paisajes soñados"

Podemos encontrar los paisajes soñados en la realidad, que siempre supera a la ficción, pero también podemos construirlos con herramientas de edición que nos permitan bucear en mundos nuevos, en lugares diferentes que no pertenecen a nadie porque ningún fotógrafo los descubrió antes. En este caso en el que la toma se ha reencuadrado al formato panorámico, el río Arazas se desliza junto a un bosque ligeramente retocado para saturar por zonas los amarillos de las hojas. Los límites en el retoque se los impone cada uno en función de lo que buscamos en cada fotografía.